El terremoto de magnitud 6.4 en la escala de Richter que sacudió esta madrugada Albania ha causado al menos 21 víctimas mortales y más de 600 heridos, según informó la ministra de Defensa, Olta Xhacka.
De entre los heridos, nueve continúan en estado crítico y uno de ellos ha sido operado de urgencia.
La mayoría de las víctimas murieron al derrumbarse los edificios en los que se encontraban, fundamentalmente en Durres y la pequeña localidad de Thumana, al norte de Tirana.
Los equipos de rescate han conseguido sacar de entre los escombros a 45 personas. Las operaciones para rescatar a otros posibles sepultados continuaron durante la noche del martes con dificultad, ya que se efectúan en edificios que todavía están parcialmente en pie y bajo amenaza de derrumbe.
La última rescatada fue una mujer que perdió a su hija de ocho años en un edificio que colapsó sobre ellas.
El terremoto ocurrió cerca de las cuatro de la madrugada, con el epicentro localizado en el mar Adriático, a 10 kilómetros al norte de la ciudad de Durres y a 40 kilómetros al oeste de Tirana.
Desde primeras horas de la mañana se han producido más de doscientas réplicas de hasta 5.4 grados y que han afectado también a localidades al norte de la capital. La última, de 4.7 grados, ocurrió a las 18:19 hora local.
El primer ministro, Edi Rama, aseguró que llegará a un acuerdo con los municipios de Durres, Vlora y Kavaja para acoger a aquellos que han perdido sus hogares en hoteles privados. Tan solo en la capital 500 casas se han visto afectadas, según informó el alcalde, Erion Veliaj.