Luego de 22 años lejos del Estadio Azteca, Cruz Azul "saboreó" un poco de sus viejas glorias en el Coloso de Santa Úrsula derrotando 3-0 al Puebla, las anotaciones corrieron a cargo de Andrés Rentería, Milton Caraglio y Elías Hernández.

"La Máquina" salió a la cancha con once de lujo y cerca de 55 mil personas en la tribuna, es por ello que desde los primeros minutos buscaron imponer condiciones en el partido mediante la posesión del balón y recalando sus ataquen en el juego aéreo.

Todo el primero tiempo Cruz Azul atacó por sus bandas, especialmente apoyándose en Elías Hernández para que con su buen toque de balón pudiera generar ocasiones para Milton Caraglio, sin embargo la línea de cinco defensores plantada por Enrique Meza impidió que el argentino tuviera oportunidades claras; por lo que el primer tiempo terminó 0-0.

Para el segundo tiempo, Cruz Azul salió con la misma idea que en los primeros 45 minutos, Elías Hernández era el creador del juego por la banda y convirtieron al portero poblano Nicolás Vikonis en la figura que impidió que Puebla fuera goleado.

Los celestes tuvieron gran número de oportunidades, no obstante, la pelota parecía no tener ganas de entrar a la portería; esto hasta que Andrés Rentería conectó un cabezazo dentro del área para hacer estallar de júbilo el Estadio Azteca.

Minutos después, Martín Cauteruccio recibió un balón con el pecho y entró al área para ser derribado por la defensa "camotera" y se marcó un penal dudoso que Milton Caraglio no perdonó.

La fiesta cerraría con una gran serie de paredes entre Elías Hernández y Caraglio que el volante mexicano definió con la clase que lo caracteriza y puso el 3-0 definitivo para que Cruz Azul ganara, goleara y gustara en su regreso a casa.