La retención de una flotilla ucraniana por parte de fuerzas rusas en el estrecho de Kerch (Crimea) ha escalado este lunes al grado de avivar el temor de un conflicto armado abierto entre Rusia y Ucrania.

El Parlamento de Ucrania aprobó la propuesta presentada por el presidente, Petró Poroshenko, de imponer la ley marcial que activa el estado de guerra en una parte del país a partir del 28 de noviembre y por espacio de 30 días, tras el incidente naval en el mar Negro.

Por su parte, Estados Unidos y los países de la Unión Europea respaldaron en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas a Ucrania, condenaron la acción de Moscú y exigieron la liberación inmediata de los buques y marineros capturados, misma demanda que hizo la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), por separado.

En respuesta, Rusia acusó al presidente Poroshenko, de orquestar la crisis en el mar de Azov con el objetivo de cancelar las elecciones previstas para marzo y mantenerse en el poder, e informó que tres barcos de la Armada Ucraniana, Berdyansk, Nikopol y Yany Kapu, fueron detenidos luego de incursionar la víspera en el mar territorial de Rusia y avanzar sin autorización al estrecho de Kerch, que une el mar de Azov con el Negro.

Información: El Siglo de Torreón  
Fotografía: Redes