Covid-19 y guerras, mezcla mortal ONU

Covid-19 y guerras, mezcla mortal ONU Covid-19 y guerras, mezcla mortal ONU.

La combinación de guerra y COVID-19 resulta en una mezcla mortal para las comunidades más vulnerables, según Mark Lowcock, secretario general adjunto de Asuntos Humanitarios y Coordinador del Socorro de Emergencia de la Organización de las Naciones Unidas.

De acuerdo con Lowcock, lugares como Afganistán, Libia, Siria y Yemén, continúan sufriendo bombardeos de ciudades y pueblos que han dejado a las personas sin acceso al agua, electricidad o saneamiento, lo que resulta fundamental al momento de protegerse del virus.

Lowcock recuerda que si bien más de 115 gobierno se sumaron al llamado en el que el secretario general de la ONU, António Guterres, pidió un alto al fuego inmediato y global, hay países que no se han sumado a esta iniciativa.

"Los conflictos prolongados continúan causando estragos en muchas partes del mundo. A menudo, esto implica el uso de armas explosivas pesadas en áreas pobladas, con efectos devastadores para los civiles.

En este momento, más de 50 millones de personas están afectadas por los conflictos en zonas urbanas", escribió Lowcock en una columna de opinión difundida a través de su cuenta oficial de Twitter.

De acuerdo con él, el impacto en las sociedades será tan profundo que perdurará en las generaciones venideras.

El funcionario también hizo hincapié en la gravedad de la utilización de armas que originalmente son diseñadas para el combate en espacios abiertos y que finalmente son utilizadas en áreas pobladas, por parte de grupos armados no estatales.

Estas acciones, debido a que producen grandes explosiones y efectos de fragmentación, ponen riesgo vecindarios enteros, ocasionando que la gran parte de las víctimas sean civiles con heridas complejas que luego saturan los centros médicos.

Esta situación, de por sí complicada, se agrava ante la presencia de un problema sanitario como el de COVID-19.

"El uso de armas explosivas pesadas daña y destruye la infraestructura esencial necesaria para operar los sistemas de salud, como hospitales y otras instalaciones médicas, así como las líneas de suministro de energía y agua y las redes de saneamiento. Esto desencadena efectos de dominó y más muertes y sufrimientos civiles más allá de las zonas de explosión de las armas", escribió Lowcock.

De acuerdo con el funcionario, es necesario tomar medidas cuando antes para evitar un mayor deterioro de los sistemas de salud más frágiles del mundo.

"En lugar de atacar y devastar ciudades, deberían recibir apoyo en su lucha contra esta nueva amenaza inmensa para la humanidad: COVID-19", concluye Lowcock.





 

información: NTX/I/IS/ECA