La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, solicitó este lunes a la Fiscalía General de la República (FGR) informar públicamente sobre los presuntos vínculos del alcalde de Teuchitlán, Jalisco, con el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), tras su detención el pasado fin de semana.
Durante su conferencia matutina, Sheinbaum declaró: “La fiscalía tiene que informar cuáles son los vínculos o los presuntos vínculos con uno de los cárteles”, refiriéndose al caso del edil José Ascensión Murguía Santiago, arrestado por su presunta participación en actividades delictivas, incluyendo delincuencia organizada y desaparición de personas.
El mandatario local estaría relacionado con el rancho Izaguirre, señalado como un campo de adiestramiento del CJNG. Según diversos testimonios, el alcalde no solo conocía la existencia del lugar, sino que habría recibido sobornos del cártel y colaborado con sus actividades criminales.
El caso ha causado conmoción en Jalisco y a nivel nacional, luego de que el colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco denunciara, el pasado 8 de marzo, que en el rancho se encontraron 400 pares de zapatos, lo que consideraron evidencia de un posible “campo de exterminio”. No obstante, la versión oficial del Gobierno ha sido que el lugar funcionaba como un centro de entrenamiento para el CJNG.
Sheinbaum fue enfática al señalar que será el fiscal Alejandro Gertz Manero quien debe aclarar los detalles: “Nosotros pedimos que la Fiscalía atrajera el caso… él tiene que informar cuáles son las pruebas de este vínculo delincuencial del presidente municipal”.
El caso ha incrementado la presión sobre el nuevo gobierno de Sheinbaum para atender la crisis de desapariciones en México, donde hay más de 120 mil personas no localizadas desde la década de 1960. La opinión pública y organizaciones civiles exigen una estrategia contundente ante la creciente influencia del crimen organizado en instituciones locales.