Expertos de la UNAM determinan con mayor precisión cronología de pinturas murales en Teotihuacán

Expertos de la UNAM determinan con mayor precisión cronología de pinturas murales en Teotihuacán Expertos de la UNAM determinan con mayor precisión cronología de pinturas murales en Teotihuacán.

Teotihuacán desarrolló una profunda y compleja civilización, pero sin historias escritas que fueran testimonio de su avance y declive. Sus referentes son principalmente formas pictóricas de comunicación visual, es decir, sus pinturas murales.

Ahora, mediante la técnica de datación arqueomagnética, expertos de la UNAM, en colaboración con el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), determinaron con mayor precisión la cronología de dos pinturas representativas de las primeras etapas, en el complejo Quetzalpapalotl.

Este avance es significativo, porque los cálculos indican que la nueva cronología: entre los años 312 y 409 d.C., coincide con un gran auge de la pintura mural en esa ciudad. Además, la datación de éstas y otras piezas permitirá ampliar la información y conocer mejor la historia del complejo arqueológico de Mesoamérica, indicó Avto Goguitchaichvili, titular del Servicio Arqueomagnético Nacional (SAN) de esta casa de estudios.

“Los círculos rojos son la fase inicial de aparición de las pinturas; los arqueólogos los ubicaban hacia el año 250, pero nosotros encontramos que su elaboración fue más tardía”, describió el también investigador del Instituto de Geofísica (IGf) de la UNAM unidad Morelia.

Datación arqueomagnética

Para la datación, en la que también participan Gloria Torres, Verónica Ortega y Jorge Archer, del INAH, se utilizó la técnica de Magnetización Pictórica Remanente, a fin de analizar el magnetismo de minerales contenidos en los pigmentos rojos usados en la elaboración de pinturas murales.

Los resultados fueron confiables sólo para 11 muestras, pues “los procesos de restauración realizados, quizá en la década de los 80, probablemente alteraron la señal magnética”, consideró.

Luego de los resultados obtenidos en este trabajo, en el que también participan Juan Morales, Rubén Cejudo y Jaime Urrutia Fucugauchi, del Instituto de Geofísica, se espera continuar la datación de otras piezas en Teotihuacán.