Los Rayados sumaron tres sufridos puntos al derrotar por la mínima diferencia a unos Pumas que en el segundo tiempo dominaron gran parte del partido, con anotación del defensa Nicolás Sánchez, de quien se podría decir que ha nacido un nuevo ídolo al ser coreado por la afición y nombrado el jugador del partido.

Apenas silbó el árbitro el inicio del partido y Monterrey se arrojó con todo en busca de la portería visitante, logrando mover el marcador en un gol de esos llamados de vestidor.

La anotación se gestó desde un tiro libre de Dorlan Pabón que el guardameta Saldívar envió con complicaciones a tiro de esquina, mismo que fue ejecutado por Dorlan y cabeceado por Nico Sánchez, convirtiendo el 1-0 apenas a los tres minutos de juego.

Después de que Pumas intentó reaccionar generando dos buenas jugadas sobre él área de Barovero, Monterrey con transiciones a velocidad cimbró en dos ocasiones consecutivas el travesaño.

Un desborde de Vangioni por izquierda envió un centro que Madrigal remató de cabeza al larguero, la pelota cayó en los botines de Avilés, quien también reventó la pelota en el poste superior.

Para el arranque de la parte complementaria Pumas volvió a sacar un susto al Monterrey con un centro raso por derecha, que para fortuna de la causa rayada quedó unos centímetros adelante de Felipe Mora ante la barrida de Basanta  y la salida de Barovero.

Monterrey dejó de generar ese fútbol vistoso del primer tiempo y fueron los universitarios los que se adueñaron del medio campo y empezaron a construir jugadas que hacían sentir sensación de peligro en la portería rayada.

La suerte estuvo ahora del lado del Monterrey, fue el mismo travesaño en el cual los locales habían estrellado dos disparos, el que evitaba que los Pumas empataran el partido, luego de que Felipe Mora prendió una volea que dejó parado a Marcelo Barovero, observando como la pelota se estrellaba en el vértice superior derecho.

Monterrey estuvo cerca de clavar el segundo en tiempo de compensación con un gran contragolpe que inició Rodolfo Pizarro tras un tiro de esquina de Pumas que terminó en un cabezazo de Jesús Gallardo que fue desviado a tiro de esquina por Alan Mozo, quien estuvo muy cerca en la marca.

Con la gente pidiendo el final del partido, el juez central Diego Montaño Robles hizo sonar su silbato y decretar el triunfo para el Monterrey que llegó a 12 puntos para ubicarse en el segundo lugar general, a reserva del resultado de América, y de paso quitarle el invicto a Pumas, que se quedó en 10 puntos.

Información: ABC