Durante una gira por Estados Unidos, el influencer español Ibai Llanos se reunió con Bad Bunny para grabar contenido exclusivo. Lo que prometía ser una charla centrada en música urbana tomó un giro inesperado cuando el artista puertorriqueño reveló su profunda pasión por el boxeo, incluso atreviéndose a lanzar desafíos imaginarios a leyendas del ring.

“Sí, a mí me gusta mucho el boxeo”, confesó Bad Bunny ante la pregunta de Llanos. Acto seguido, no dudó en mencionar a quién le gustaría enfrentar en un combate real: “Contra el ganador del Canelo-Crawford. Canelo nunca ha sido tumbado y yo creo que tengo la pegada”.

Aunque el comentario pareció en tono de broma, Bad Bunny mantuvo una postura seria al hablar de sus “combates soñados”, entre ellos uno contra Muhammad Ali, a quien asegura que “le habría vencido”, y otro contra Julio César Chávez, que visualiza como un empate épico: “Hubiera sido un combate empate a 15 asaltos, al toma y dame, en México o en Puerto Rico”.

Más allá de sus declaraciones sobre el boxeo, el cantante también habló de su visión sobre el éxito y la vida adulta. “No estoy mejor que cuando tenía ocho años y me hacían todo. De la vida adulta, sí estoy mejor. Yo me levanto y no pienso en lo que he conseguido, pienso en lavarme la boca. Nada profundo”, afirmó.

Las declaraciones del artista han generado revuelo entre sus seguidores y fanáticos del boxeo, dividiendo opiniones entre quienes celebran su espontaneidad y quienes consideran sus palabras un exceso de confianza. Lo cierto es que Bad Bunny sigue demostrando que no teme salir del guion y explorar nuevas facetas, incluso en el cuadrilátero… aunque sea desde la imaginación.