El Tottenham rompió una sequía de más de cuatro décadas sin títulos europeos al imponerse 1-0 al Manchester United en la final de la Europa League, disputada este miércoles en el estadio de San Mamés. El triunfo londinense llegó gracias a un confuso gol que la UEFA adjudicó a Brennan Johnson, pese a que fue el defensor Luke Shaw quien desvió el balón hacia su propia portería.
El encuentro pasará a la historia como una de las finales más deslucidas del torneo, marcada por la falta de ritmo, creatividad y emoción. Ambos equipos, lejos de sus mejores épocas, mostraron un nivel pobre, con abundantes errores y escasa claridad en ataque.
Durante la primera mitad, el Tottenham trató de tomar el control, aunque sin profundidad. El Manchester United, que también ha vivido una etapa oscura en la última década, tuvo algunas aproximaciones peligrosas, principalmente a balón parado, con Harry Maguire como su principal amenaza aérea. Sin embargo, fue en el tramo final del primer tiempo cuando llegó el único gol del partido, tras un centro de Udogie que terminó en el error de Shaw, sellando la ventaja para los Spurs antes del descanso.
En la segunda parte, el United asumió la urgencia del resultado y buscó el empate con insistencia. Diallo y Bruno Fernandes lideraron los esfuerzos ofensivos, generando varias oportunidades, incluyendo una salvada en la línea de gol por Van de Ven. La entrada de Garnacho agitó al equipo de Ruben Amorim, pero la falta de eficacia fue determinante. Un remate fallado por Ruben Fernandes a bocajarro resumió la noche de los “diablos rojos”: dominio sin definición.
Pese al sufrimiento en el cierre, el Tottenham resistió y se llevó no solo el trofeo de la Europa League, sino también un pase directo a la próxima edición de la Champions League y la posibilidad de disputar la Supercopa de Europa. Este triunfo significa el primer título continental para los Spurs desde sus conquistas en la UEFA de 1972 y 1984.
El Manchester United, por su parte, profundiza su crisis institucional y deportiva, incapaz de traducir su peso histórico en logros recientes. Mientras tanto, el Tottenham celebra una victoria inesperada que quedará grabada en su historia moderna.